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Pasamos una noche y todo fue increible tanto lo que es el alojamiento que es precioso y acogedor como el trato con el personal que fue inmejorable (Nerea y Nines), son majisimas y super familiares, nos sentimos como en casa. Volveremos! El desayuno variado abundante y delicioso. Si tienes alguna intolerancia no tienen problema en adaptarse. La ubicacio es perfecta en el centro del pueblo y cerca de las piscinas naturales.

La casa en general es muy cómoda, limpia, espacios muy agradables, tanto la habitación como los espacios comunes, tranquilo, huéspedes respetuosos, Abelina un encanto, pendiente de las necesidades y con buena mano para la repostería, damos fe de ello en el desayuno, q es bastante completo, casero y de calidad. A destacar la independencia q el alojamiento te ofrece, aún habiendo otros huéspedes te sientes como en tu casa.

Sitio ideal, con un montón de zona verde, pista de futbol, zona de sombra. Fuimos toda la familia, unas 14 personas y fue divertidísimo. Tuvimos una casa con porche donde podíamos comer en una mesa muy grande y 2 habitaciones con literas. Todo limpio y cómodo. Piscina natural pegada al alojamiento. Buen ambiente.

El alojamiento nos sorprendió muy gratamente. Su nombre, "Susurros de Manadero", muy acertado, debido al leve sonido de una chorrera natural que discurre junto a la casa. Un entorno genial, en un pueblo precioso.

Ana, la anfitriona nos trató de forma excelente. Nos espero y acompaño al alojamiento. Todo como nuevo en la casa, como las fotos.

Nos pareció muy acogedora y muy bien decorada, aunque sea algo que no se tiene mucho en cuenta al escoger un alojamiento, es destacable. La casa está súper bien equipada, está muy limpia y los dueños son muy atentos! Cabe destacar que aún estando a 37 grados en el exterior, al ser una edificación de paredes muy gruesas, aguanta muy bien la temperatura. La situación es ideal si tenéis pensado ir al festival de cine, porque está literalmente a 2 minutos.

El alojamiento situado en un enclave perfecto, cerca de todos los lugares que queríamos visitar. Cuidado hasta el más mínimo detalle. Habitaciones amplias y Luminosas. Un lugar tranquilo y perfecto para descansar. Nos han tratado como en nuestra propia casa. Alba y Ruben son unos anfitriones de lujo. Y que decir de la terraza y restaurante. Comida de primerísima calidad. Repetiremos seguro!!

Oliver y Paqui son dos personas muy atentas, las cuales procurarán que no te falte de nada en ningún momento. Además de ser acogedores y generosos, ya que nos regalaron productos locales de la zona. En lo que respecta al alojamiento nos hemos quedado sin palabras, la casa rural está decorada con muy buen gusto y transmite mucha paz. Además está muy limpia y ordenada. Estuvimos muy agusto disfrutando de nuestra estancia allí. Gracias

El alojamiento tiene un encanto especial, se siente hogar, todo decorado con detalle y mucha personalidad. Te sientes en casa desde el primer momento. Trini y su hija nos trataron de excepción, y sus recomendaciones nos encantaron. Sin duda volveremos.

Tuve una estancia maravillosa en este alojamiento. La ubicación y los servicios son excelentes, pero lo que realmente hizo la diferencia fue Vero. Ella es una persona extraordinaria que hizo que me sintiera como en casa desde el primer momento, siempre dispuesta a ayudar en todo lo que necesitaba. Su amabilidad y atención realmente hicieron que mi experiencia fuera inolvidable. Recomiendo este lugar sin dudarlo.