Hoteles de playa en Norte de Cerdeña

Me alojé con dos amigas durante 3 días. La habitación estaba muy bien ubicada y equipada, con cafetera, aire acondicionado, una mini nevera para el agua y el baño estaba reformado. El alojamiento estaba en segunda línea de playa y el anfitrión fue muy amable y atento durante todos los días. A lo largo de toda nuestra estancia, estuvo pendiente de si necesitábamos algo. Además, estaba cerca del casco histórico paseando por el paseo marítimo. Muy recomendable.

El apartamento muy bien, limpio y moderno lo mejor la ubicación y los servicios cerca de la playa, restaurante, bar, el paseo marítimo muy chulo y está bien ubicado para ir ha visitar el noroeste de Cerdeña.

El hotel una maravilla, en un entorno idílico, con tres playas/ calas privadas especiales (de las mejores de la isla tanto por la arena fina como por el mar). La atención del servicio, en especial de Roberto, un 10. La piscina magnífica con unas vistas al mar de lujo. Muy bien desayuno. Habitación amplia con terraza. Limpieza 10.

Tanto Marco como Consuelo fueron encantadores y nos dieron un montón de recomendaciones de playas y lugares donde para visitar. No puede estar mejor ubicado; al estar situado al lado del puerto, está al lado tanto del casco antiguo como del paseo marítimo. Además, el alojamiento tiene en la entrada sombrillas y esterillas que te puedes llevar a la playa. No pudimos estar más a gusto. ¡Y encima resultó que Consuelo era italo-zaragozana, y habla perfecto español! ¿Qué más se puede pedir?😉

La localización es perfecta para visitar la costa Esmeralda, está localizado estratégicamente para ir vista do todas las playas. Hay completa flexibilidad en la entrada para que puedas aprovechar tu día y luego ir al alojamiento. Te deja el desayuno preparado para que puedas tomarlo cuando quieras y si comenzar tu día. Las habitaciones son como casitas por lo que tienes tu espacio separado.

El sitio es precioso entre la montaña y el mar, muy cerca de las playas de costa Esmeralda, la cama muy cómoda, y el desayuno de diez.

La zona de la piscina al borde del mar, con acceso a la playa y vistas geniales.

En una palabra:impresionante. Estefanía, la host es amable y súper detallista. El apartamento estaba hiper limpio,todo muy nuevo y a pocos minutos andando del paseo marítimo y la playa. Nos dejaron varias botellas de agua en la nevera, así como unos helados,una botella de vino sardo y unas gominolas naturales súper apetecibles. Qué decir del detalle de Estefanía con el regalo que nos hizo! Muy recomendado! Encima nuestro vuelo no salía hasta las 9 de la noche y nos permitió quedarnos en el apartamento durante todo el día! Un 10!!!