Maravilloso hotel. Es un oasis en medio de Battambang, en el que te hacen sentir como en casa desde el primer momento. Estoy deseando volver!
Habitación amplia, cama cómoda, aire acondicionado. Ducha con agua caliente. No hay armario, pero hay una mesa con estantes con espacio para dejar las cosas. En la zona común hay varias mesas, un sofá, hamacas y una mesa de billar.
Dormitorio espacioso y limpio, cerca de una panadería y supermercado asia market.
Las instalaciones son magníficas, el hall de entrada es precioso,y las habitaciones muy cómodas.desde el balcón, ver el amanecer o chaparrón, si toca, es espectacular. La piscina está muy también, y el desayuno una maravilla, muy diverso, tanto platos asiáticos como occidentales, que varían de un día a otro. Hicimos uso del masaje tradicional y quedamos encantados. El servicio también es muy atento y amable.