Bed and Breakfasts en Región de Lisboa

Lo que más me gusto fue la ubicación. Estaba en el centro de todo.. Al lado de todas las tiendas.. restaurantes, del centro y a un paseo de la plaza del comercio. Es un hotel pequeñito, con habitaciones prqueñitas, pero está muy limpio y muy bien insonorizada. El baño es buenísimo y las camas y las almohadas aunque son un poco blandas para mi.gusto, no me impidieron dormir como.un bebé. Ah y lo.mejor. en el.desayuno, que es buenísimo tienen los mejores pasteles de nata de todo lisboa, incluido los de la pastelería de belen

El hotel tiene todo lo necesario. Buena cama, buena ducha y buen desayuno. La habitación no era muy grande pero para dormir y trabajar en la mesita, era suficiente. Me tocó habitación con un balcón pequeño pero muy cómodo.

La habitación era mayor de lo que esperaba. La cama grande y muy cómoda. La insonorización de la habitación era buena, a pesar de que casi todas las noches hubo música en directo en la plaza de al lado por las fiestas de San Antonio. El desayuno era muy variado y reponían los alimentos hasta el último momento. El personal de comedor muy servicial y agradable. Dos dias nos prepararon una bolsa de comida para llevar, a las 7:30 y a las 6:20, cuando el horario para desayunar empezaba a las 8 de la mañana.

Nos gustó la experiencia de dormir y desayunar en un barco típico de canales europeos. Están recién reformados con un estilo minimalista. Me sorprendió positivamente el tamaño de la cama de matrimonio y el baño, la ducha es bastante amplia .El detalle de la cafetera Nespresso con unas cápsulas para el desayuno también nos gustó.

Las camas son cómodas y muy limpia la ropa de cama y toalla. La cortina en la litera da intimidad, todo un acierto. No tenía incluido el desayuno, pero opte por desayunar allí, y me gustó. Había de todo, relación calidad precio bien. La ubicación muy buena. Tiene una terraza en la última planta muy chula, para disfrutarla

Lo que más me ha gustado de este guest house es la tranquilidad de desayunar y dormir en pleno campo. El desayuno que ofrece está muy rico, lo que tienes que comerlo al aire libre, no hay comedor interior.

La cama muy cómoda, es como quedarte en la casa de algún familiar, todo muy limpio, bonito, espacioso y bien ubicado, Martina es una persona increíblemente amable, muy agradecida, solo pude disfrutar el desayuno un día pero estaba muy rico! Recomiendo no hacer planes tan pronto como los que hice yo y sentarse tranquilamente a desayunar

La limpieza impecable, camas muy cómodas y el personal muy agradable. No llevaba el desayuno incluido, pero optamos por pagarlo y desayunar en el hotel. Buenísimo y variado. Recomendado

Esta cerca de centro solo 3 paradas con metro, era facil aparcar en la calle. La cama comoda y el desayuno esta bueno y hasta 11:00 puedes desayunar.