Hoteles cápsula en Región de Chūbu

La experiencia de dormir en un hotel cápsula Tienen todo lo necesario para el baño

Las cápsulas son bastante más grandes y agradables que las de otros hoteles cápsula. Es un lugar muy limpio y con un buen ambiente.

Estilo muy urbano y moderno con habitación tradicional japonesa, pero con un toque retro. Baño pequeño como es habitual en Japón, pero la habitación bastante espaciosa y las camas comodísimas. ¡Me ha encantado y solo puedo recomendarlo!

El hotel es precioso, situado en medio de un bosque con un río. Te vienen a buscar a la estación de Takayama. Las vistas desde la habitación son espectaculares y duermes con el sonido del Río de fondo. Decoración tradicional japonesa, muy cuidados todos los detalles. Una experiencia increíble en nuestro viaje a Japón. Los onsen y el personal del hotel super amable. Recomendaría la experiencia.

Nos enamoró, fue como un viaje al antiguo Japón tradicional! Nos tocó un cuarto con living separado, con arquitectura japonesa clásica. En el lobby tiene un manga café con una colección impresiónante de cómics y revistas. Usamos el onsen para bañarnos lo cual es todo una experiencia unica. Y por último Tener la cena buffet está buenísimo, también hay café y cocoa gratis durante el dia.

Una experiencia maravillosa en el centro de Takayama. La atención que el staff pone en cada detalle, la habitación estilo japonés con tatami y futones y el onsen publico… un día de relax después de visitar las ciudades más frenéticas de Japón. Nos encantó la experiencia y repetiríamos sin duda! Mención especial a los yukatas y que nos ofrecieron dejar las maletas después del check out!

En mi viaje por Japón quería quedarme en una casa típica japonesa y este alojamiento cumplió mi expectativa. La habitación es cómoda y los espacios comunes cuentan con todo lo necesario. La anfitriona fue muy amable y sus gatos son maravillosos, en especial Chi chan. Gujō, además, es hermoso, de mis lugares favoritos de Japón.

Está a menos de 10min andando de la estación y del casco antiguo. El desayuno está bastante bien (es japonés y no occidental, lo normal en la mayoría de hoteles de Japón) y el onsen es un puntazo para relajarse al volver.

Me gustó todo, la ubicación, la cápsulas, las instalaciones, ríete un pequeño onsen, el personal amable. Fue uno de los mejores hoteles donde me alojé en Japón.