Las habitaciones que tienen vistas son excepcionales. Los ciervos andan por ahí dando vueltas jeje. El hotel cuenta con actividades para grandes y chicos (nos enseñaron a hacer origamis, escritura japonesa). Hay un supermercado en el hotel. Tiene un onsen, creo que cocina, los baños modernos. Recomendable al 200%
Habitación tradicional japonesa con yukata incluido. Camas muy cómodas. Baño correcto, onsen muy bien.
Es un hotel con habitaciones típicas japonesas. Personal muy amable. Bien ubicado.
Nos hemos alojado en este Hotel en Nara y ha superado con creces las expectativas, habitación increíble, bonita, tradicional y bien cuidada con todos los detalles, ubicación inmejorable , con vistas espectaculares y practicamente en el.parque y las personas que trabajan allí un 10,; amables, empáticas, agradables, serviciales, en concreto el caballero k hace talleres de origami y cosplay, una persona encantadora.. El mejor hotel en el que hemos estado en Japón y han sido muchos y de 4 estrellas. Sin duda regresaremos!. Un 10. ❣️🥰👍🏻
Preciosa casa tradicional japonesa de madera, exquisito porridge de arroz gratis, cama y habitacion muy comoda con todo lo necesario
La habitación era espaciosa estilo japonés. Los futones eran súper cómodos, no parecía que durmiésemos en el suelo. El baño y el lavabo estaban separados pero para una noche no importa. Está justo al lado del parque de Nara, y a 10’ de la estación de tren. El personal súper atento. Hay un supermercado en la parte de abajo y se puede desayunar en la calle en mesas. Y cuentan con un centro de información y muchas actividades tanto de caligrafía como vestirte de gheisa.
Excelente experiencia para tu viaje a Japón
Todo nos gustó, no falta detalle. La amabilidad, el entorno, las instalaciones. Una experiencia japonesa en toda regla.
Hotel y personal impecable y profesional. La habitación era bastante amplia para lo que es Japón. Te proporcionaban todo tipo de productos de baño y albornoz y zapatillas. También había nevera. La ubicación cerca de la estación de tren y de autobuses lo que facilita el traslado a otras ciudades como Osaka o Kioto y el transporte en la propia ciudad.
El sitio más bonito dónde me quedé en Japón, la habitación tradicional japonesa es preciosa y justo se puede ver la pagoda por la ventana, nos encantó. Todo limpio, el personal simpático (con muy buen inglés) y además hay cocina en el edificio, así como otras salas para que las usen los invitados. Te puedes encontrar ciervos en la puerta, o casi al lado, que es lo que nos pasó, son súper bonitos. ¡Me encantaría volver a quedarme aquí en mi próximo viaje a Japón!