Hoteles en Costa Rica

La comodidad, la limpieza y el hotel en sí tenía muy buenas instalaciones. La cama es realmente cómoda. El desayuno incluido fue increíble.

Las instalaciones perfectas, muy aseado y ordenado, tienen parqueo y todo es muy seguro. La piscina está muy limpia al igual que todo, sin dejar de lado el desayuno que estuvo delicioso. Miguel y su Esposa son excelentes anfitriones hacen que te sientas como en casa. La ubicación es genial ya que está a unos minutos de playa tamarindo, conchal entre otras, sin duda volveré y los recomiendo 100%.

La originalidad del lugar, estar en el medio del bosque tropical, rodeados de vegetación y animales. Si bien son "carpas" son tan cómodas como una habitación de hotel, para los niños (que teníamos dudas) fue una experiencia inolvidable, no se querían ir. Poder comer ahí de noche es un placer, hay café, te, heladera. Capítulo a parte para la atención que es de primera calidad, siempre disponibles para resolver cualquier duda y preocupados por que todo este perfecto. Se nota que son los mismos dueños los que están a cargo todo el tiempo.

El contacto con la naturaleza y sobre todo la amabilidad del dueño y de todos los trabajadores, son estupendos.

Un lugar único en el bosque de Malekus, lugar lleno de detalles y sobre todo del espíritu de sus dueños, un placer haber convivido con Roger y Rosi, excelentes y cálidos anfitriones. Muchas gracias por todo!

Todo! Es el mejor hotel en el que hemos estado en Costa Rica, la decoración es preciosa, está cuidado al detalle y Joe & Isabelle son encantadores, dispuestos ayudarte en lo que necesites y flexibles en la hora de llegada. Es un oasis de paz, perfecto para descansar y a 10 minutos en coche del pueblo.

Un lugar acogedor, bien equipado, cómodo, súper limpio y con una excelente ubicación!

El sitio es espectacular, las vistas, las habitaciones,… pero lo mejor es el personal. Jorge nos hizo sentir como en casa y nos enseñó muchos animalitos que hay por la zona.

Una buena atención marca la diferencia. El lugar es precioso y la atención del personal fue excelente. Resalto el hermoso trato de Selva quién hizo que nuestra estadía fuera agradable y cálida. Sin duda alguna esperamos regresar.

la calidez humana de Freddy y Emiliano y el resto (perdón por no recordar sus nombre) compiten con la belleza del lugar.

El servicio , nos adornaron la habitación por nuestro aniversario, las instalaciones padrisimas