Hoteles y casas para familias en Gualaceo

Arhaná Hosteria & Resort se encuentra en Gualaceo, a 32 km de Museo Pumapungo, y ofrece alojamiento con piscina al aire libre, parking privado gratis, jardín y salón de uso común.

J

Javier Esteban

De

Ecuador

Excelentes instalaciones, limpieza, desayunos buffet de primer nivel !

Quinta maría isabel. Elegante y restaurada está a 39 km de Museo Pumapungo y ofrece alojamiento con restaurante, jardín, salón de uso común y terraza.

G

Galo

De

Ecuador

La atención de los anfitriones fue espectacular. Amabilidad, cortesía y siempre estuvieron dispuestos a corregir cualquier detalle que se puedan generar en las estancias. Felicitaciones por eso.

Twelve Hummingbirds Andes Retreat está en Paute, a 45 km de Museo Pumapungo, y dispone de alojamiento con centro de fitness, parking privado gratis, jardín y terraza.

R

Ricardo Hurtado

De

Ecuador

El lugar muy lindo, acogedor, el anfitrion y las personas encargadas del lugar excelente atencion, nos hicieron sentir muy bien, pero me hubiera gustado que estén habilitadas todas las áreas del lugar como cafeteria y museo, para hacer del lugar más llamativo, ya que la cafetería se veía muy linda., la piscina excelente y relajadora , full recomendado para encontrarse con la naturaleza y la paz .

Hosteria Santa Ana está en Azogues, a 29 km de Museo Pumapungo, y dispone de alojamiento con jardín, parking privado gratis, salón de uso común y restaurante.

B

Byron

De

Ecuador

El lugar es hermoso, con buenas instalaciones y una amabilidad increible dispuestos ayudar en cualquier requerimiento

Cabaña Lato_puzhio está en Chordeleg y cuenta con vistas a la montaña, jardín, terraza, bar y zona de barbacoa. La casa rural ofrece wifi y parking privado, ambos gratis.

A

Ana Gabriela

De

Ecuador

Hermosa vista y lugar muy tranquilo

HOTEL en el CENTRO HISTORICO está en Cuenca, a 15 min a pie de Museo Pumapungo, y tiene terraza, habitaciones libres de humo y wifi gratis en todo el alojamiento.

S

SILVA MENDOZA

De

Perú

Excelente atención, comodidad y servicios

Hotel La Farola está en Cuenca, a 3,3 km de Río Tomebamba y a 17 min a pie de Catedral antigua.

E

Edison Daniel

De

Argentina

Hermoso! Cuando llegamos, nos atendieron de forma divina! Realmente se esmeraron en hacer que nos sintamos bienvenidos! Durante toda la estancia, fue todo muy agradable. MUY recomendado!

El Hotel Victoria ocupa una preciosa casa con jardín y vistas a la ciudad y ofrece habitaciones con balcón privado y WiFi gratuita en Cuenca.

H

Halina

De

Argentina

Nos hemos alojado en al menos 20 hoteles en Ecuador. ¡Este es el mejor en todos los sentidos! El personal, los camareros (el mejor desayuno, el mejor café). ¡Este hotel tiene alma! La sorpresa en la habitación (aperitivos, agua). ¡Y qué jardín!

Este nostálgico hotel boutique, situado en una antigua casa del siglo XIX, ofrece alojamiento de lujo y conexión Wi-Fi. Se encuentra en el casco antiguo de la ciudad de Cuenca.

M

Mª CARMEN

De

España

Pequeño hotel de lujo donde nos sentimos como la realeza. Unas instalaciones preciosas, un restaurante con platos espectaculares y una habitación en la que descansamos genial. Los productos del baño son fantásticos también. De los mejores hoteles que nos hemos hospedado, merece sin duda la pena pagar su precio. Inolvidable la experiencia

El Renacimiento - Suite Colibrí está en el barrio de Cuenca Historic Centre, en Cuenca, a 1,9 km de Museo Pumapungo y a 12 min a pie de Río Tomebamba, y ofrece alojamiento equipado con terraza y wifi...

T

Tatiana

De

Ecuador

Desde el momento en que crucé la puerta del hotel, supe que estaba en un lugar especial. La seguridad fue lo primero que me llamó la atención: las habitaciones tienen puertas con clave y las luces del pasillo funcionan con sensores de movimiento, algo que me hizo sentir tranquila al regresar tarde en la noche. Al entrar a mi cuarto, me recibió un espacio impecable, con un aroma fresco y una cama tan cómoda que solo quería acurrucarme ahí. Además, tenían almohadas y cobijas extra, un detalle que siempre valoro. Una de las cosas que más me impresionaron fue la limpieza del baño. Las toallas, de un blanco perfecto y reluciente, estaban impecables, y eso habla mucho del cuidado y dedicación que ponen en cada detalle. También disfruté de las amenidades: café, té y galletas de cortesía en horarios específicos, que le dieron un toque cálido a mi estadía. El recepcionista fue un encanto total; amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. Además, prepara un jugo de frutilla que es, literalmente, inolvidable. Por otro lado, el dueño del hotel demostró ser una persona muy atenta, asegurándose de que todo estuviera a mi gusto. Es un lugar al que definitivamente regresaré. Este hotel logró que mi estadía fuera cómoda y acogedora, como estar en casa pero con un servicio excepcional.