Hoteles y casas para familias en Alpes Julianos

El ambiente tan familiar. Está a 15 minutos andando del lago. Hay aparcamiento gratuito en la puerta del hotel.

Bonita casa tradicional reformada en parte, con todo lo necesario para hacer una estancia confortable en familia. Preciosas vistas desde el balcón donde se puede desayunar o cenar. Anfitrión muy amable con buenas recomendaciones, sencillo el check in y el check out ya que vive en la planta baja de la casa. Mis hijos disfrutaron mucho con juguetes que había en la casa. Muy cerca de lugares de interés de la zona. Parking en la misma propiedad

La familiaridad del trato que se mezclaba con un entorno de ensueño

Casa muy espaciosa, jardín precioso, camas muy cómodas, juegos para los niños ,el detalle de bienvenida y la información sobre el lugar que nos dejaron preparada

La familia un encanto. El señor de la casa nos enseño sus animales y les dio una vuelta en tractor a los niños. Muy atentos para todo y el apartamento contaba con persianas, cosa poco habitual en el país. Cocina equipada con todos los utensilios.

El alojamiento es espectacular para las familias. La habitación amplia, la zona abuhardillada para lo niños es estupenda, la sala de juegos, zona de escalada y toda la parte exterior con zonas de juegos para los niños. El servicio de desayuno y de cenas es maraviloso, con todos los productos frescos, de la zona y caseros. Todo estaba súper rico. Sin duda recomiendo este alojamiento

El pueblo donde está ubicado el alojamiento, Ratece y el entorno es maravilloso. Nosotros hicimos una ruta de tres días por Eslovenia y elegimos este apartamento como campo base y lo acertamos. El anfitrión es encantador, el apartamento muy cómodo, con una habitación muy amplia y con una cocina muy acogedora para las comidas y los juegos en familia. Adicionalmente nuestros hijos disfrutaron mucho de la canasta de basket y de la cama elástica que tienen en el jardín.

Muy buena atención, de 10. Hay espacio para parking para varios coches. No nos molestó ningún ruido. La casa parece insonorizada ya que una familia era vecinos nuestros y solo escuchábamos a los niños al bajar las escaleras. La cocina está equipada con muchas coas no echamos de menos nada. Tiene una pequeñita mesa en el balcón donde desayunamos tranquilos.