Hoteles y casas para familias en Palawan

Las cabañas son muy sencillas pero me encantó la filosofia de la austeridad y el no necesitar comodidades para ser feliz y disfrutar. La cama muy cómodas y los baños comunes geniales. Lo mejor de todo la familia que lleva el lugar. Nos trataron increible y la cocina ahi es espectacular. Buenisimos todo hasta el desayuno. Estuvimos dos dias y diafruté cada segundo. Recomiendo esta parada en tu viaje. Mando todo mi cariño a ese lugar magico al que me encantaria volver algun dia.

La amabilidad de la familia que vive alli. También la ubicación. Es muy sencillo pero suficiente si solo lo quieres para ir a dormir. Nosotros lo recomendamos!

Me encantó este lugar, es simplemente perfecto, aquí describo lo que más me gustó: escuchar las olas del mar desde la habitación, estar entre la naturaleza, la playa está al frente, hay hamacas para relajarse, el lugar es limpio y acogedor, buen precio, buen WiFi, Lorna y su familia son unos amores, muy atentos, amigables, estuvieron pendientes de todo lo que necesité. Todos los días frente a la playa tuve un delicioso desayuno. Me siento agradecida por haber encontrado este lugar

Una familia muy agradable, la ubicación es perfecta si lo que buscas es visitar el nido, la habitación tiene baño privado y aire acondicionado. Perfecto

El personal muy amable y familiar. La comida impresionante. Las vistas inmejorables. Y pura tranquilidad.

La familia que lo regenta son gente encantadora, me ayudaron en todo momento tanto en los transportes como los contactos para los tours island, instalaciones modernas y super limpio, el desayuno riquísimo y muy bien de precio, pendientes en todo momento de ayudarme en todo lo que pudiera necesitar %100 recomendable. 1000000 gracias y un abrazo muy fuerte

Nos han hecho sentir parte de la familia. Han sido muy amables y atentos en todo momento. Ha sido una experiencia única de sentir que estábamos en una isla desierta alejada de la civilización y en plena naturaleza. Tanto la comida como el desayuno carero espectacular. El sitio es un paraíso.

Todo, Kenneth nos trató como si fuéramos de su familia, muy atento y servicial. La habitación grande y limpia y la zona tranquila, con la montaña al frente y con animales y niños alrededor. Me habría quedado allí un año si hubiera podido.

El alojamiento es muy bonito y muy cómodo, pero está muy muy alejado de todo. Necesitas siempre vehículo para moverte, nosotros al ser una familia de 4 adultos más 4 niños teníamos que contratar el servicio de van para ir a cualquier sitio. Esta en medio de la nada, no hay servicios ni nada cerca

Hotel familiar y acogedor. Primerísima línea de playa aunque desde ciertas habitaciones, no se ve el mar. Camas muy cómodas. La ducha estaba separada del WC. Ubicado en una zona tranquila en la que se ve un bonito atardecer. El desayuno no estaba mal y lo preparaban rápidos (en nuestra experiencia en Filipinas, esto no era habitual)