Glampings en Pinamalayan

La estadía en Parada Beach fue genial! Helen y Jau fueron súper generosos con nosotros 💛 la comida es excepcional! Es realmente un sitio muy especial, se nota el amor y la dedicación de todos los que trabajan ahí. La pasamos bárbaro y fue en gran parte por la buena onda de todos los que nos cruzamos en Parada, gracias!

Las instalaciones eran preciosas, el personal fue muy amable con nosotros y nos apoyó en todo. La habitación era muy hermosa y comoda, frente al mar y muy acogedora, muy fresca en la noche, no pasamos calor. La comida deliciosa, con ingredientes de muy buena calidad.

El personal me trató genial, muy amable. El lugar donde se encuentra el alojamiento es precioso, tranquilo, el lugar ideal para relajarse

Nuestra estancia aquí fue genial! Al llegar al hotel Michael nos recibió con la sorpresa de que, al no haber más huéspedes en ese momento, nos cambiaba de habitación a la villa principal. Una villa preciosa en primera línea de playa con unas vistas increíbles. Tanto Mike como su madre fueron super amables y atentos en todo momento, queriendo hacer de nuestra estancia la mejor. En cuanto a la ubicación, este alojamiento tiene dos vías de llegada, una por una calle de barro que con lluvia no es la mejor y otro acceso por el pueblo principal, Bucana. Nosotros optamos por coger esa segunda alternativa ya que las condiciones de la carretera son mucho mejores. Mediante esta vía, hay que estacionar la moto en el pueblo y cruzar el puente peatonal que une la zona de la playa con el mismo para después andar menos de 5 minutillos por la zona pesquera. Super recomiendo este hotel para disfrutar del norte de Palawan, sin duda volveremos. Muchísimas gracias por todo, Mike!! <3

Ideal para relajarte disfrutando de la naturaleza. Los dueños muy amables nos ayudaron incluso con una moto de alquiler que pinchó una rueda. Lo recomendaría, se está súper agustito.

En un lugar perfecto, lejos de la ciudad. Sensación de conexión con la naturaleza y el ambiente local.

Kanipa fue un regalo inesperado, llegar no es tan sencillo, pero al hacerlo te das cuenta que valió la pena. Un lugar simple y verdadero, a una hora del pueblo de El Nido, donde el ruido se apaga y todo se vuelve más lento, más natural, más honesto. Frente al mar, rodeado de vegetación tropical, este espacio invita a detenerte, respirar profundo y reconectar con lo esencial. El glamping limpio siempre y perfecto para descansar y sentir la naturaleza en su forma más pura: el sonido del mar, la brisa cálida, los amaneceres y atardeceres que acarician el alma. Aquí hay mosquitos, hormigas, pequeñas criaturas… claro, estás en el trópico, en un rincón vivo de selva y mar. Y si vienes con apertura, descubrirás que eso también es parte del encanto. Puedes hacer un tour por las islas, caminar entre manglares, visitar cascadas o simplemente quedarte quieto, en silencio, mirando el horizonte. Bryan y Jissele, los anfitriones, fueron luz Presentes, atentos, amorosos, cuidando cada detalle con calidez genuina y dispuestos a hacer de tu estadía un placer, la comida rica justo para mi dieta vegetariana. Virgi y Vince, del staff, me recibieron con sonrisas que abrazan junto a sus amigos peluditos. Recomiendo Kanipa y no perderte de esta parada No es un lugar para pasar… es un lugar para sentir. Para quienes buscan paz, verdad y un poco de magia simple, este rincón es perfecto. Gracias por tanto. Salamat!!