
De
EspañaReservamos este sitio en nuestro viaje en coche a Rumanía,porque está muy cerca de la frontera. Avisamos con antelación nuestra hora de llegada,incluso con actualización de última hora,sin ninguna respuesta por parte del alojamiento. Durante el viaje estaba leyendo comentarios que no me gustaban nada,rezando que no sea nuestro caso también. Llegamos cerca de la medianoche,cansados,hambrientos y con un niño de 5 años,con ganas de dormir en una cama un par de horas y seguir con nuestro trayecto. Pues,simplemente llegamos y no había sitio. Al mismo tiempo llegó otra familia que tenían que trasladar a otro alojamiento por el mismo motivo(con la mujer desesperada,persiguiendo a la dueña para no quedarse sin alojamiento),y a nosotros nos dijo que ese sitio no le parece adecuado,pero que si queremos ir a ver,está a unos km. Obviamente no me he querido arriesgar,por las historias que había leído de camino,y pq no era la opción que yo había reservado. Sin poder ver instalaciones ni nada,no os recomendaría ir,sobretodo con niños. Creedme que en la gasolinera que hay al entrar en Rumanía se duerme mejor. Es una auténtica vergüenza que existan sitios así,como primer contacto con la tierra rumana. Porque no solo intentarán alojarse paisanos suyos(de la Pensión Rodica),sino también turista extranjero,y eso no es una experiencia deseable,desde mi punto de vista,ni para la persona más cutre del mundo. Espero pongan remedio,o mejor aún,el candado al chiringuito.