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Hostal ideal en una zona encantadora , Con zona infantil y personal muy agradable

La gente, el ambiente del pueblo, situado en buen sitio, buena experiencia en el hostal, La dueña muy maja nos aconsejo y explicó muchas cosas.

El matrimonio que regenta el hostal son dos personas maravillosas y entrañables me encontraba como en mi propia casa

El hostal está en una ubicación impresionante, el paisaje es precioso. Todo estaba muy limpio, las camas eran comodas... Pero lo mejor sin duda fue conocer a Mikel, el dueño. Una persona majísima y dispuesto a ayudarnos en todo lo que necesitamos. Un 10 de persona!

El hostal rural está en un lugar perfecto para desconectar. Instalaciones en muy buen estado, tiene todo lo necesario. Mikel, propietario del hostal, se preocupó en todo momento de que todo estuviese a nuestro gusto, nos preparó la cena, pese a no ser un restaurante, previa coordinacion, ya que eramos un grupo de amigos, con una muy buena relación calidad precio. Repetiríamos seguro. Gracias!

Un lujo en plena naturaleza. Mikel te hace sentir literalmente como si estuvieras en tu casa. Fuimos con nuestra perrita nala y tanto ella como nosotros disfrutamos mogollon! El hostal es perfecto, limpio, desayuno sencillo pero riquisimo, y de la cena no tengo palabras, todo de calidad increible. Sin duda lo recomendamos al 100%!

Nos gusto mucho el paisaje del valle de Salazar.el pueblo de Otsagi y la ubicacion del hostal.repetiriamos.

Sagrario, la dueña del alojamiento fue muy amable en todo momento. Nos dio indicaciones de cómo llegar a los sitios y nos dio consejos. El desayuno que ofrece es muy bueno y todo es casero. El hostal es muy acogedor y muy familiar. La habitación estaba calentita cuando llegamos y no tuvimos problema para aparcar. Al lado hay un bar que se come muy bien y el trato de las camareras es excelente. En definitiva ESPECTACULAR.

Me gusto la ubicación, la comodidad del apartamento, y Yolanda es super simpática. No tuvo inconveniente de que entraramos antes y nos fueramos un poco más tarde. Y también nos gusto mucho que tuvieramos descuento en todas las comidas que hicimos en el hostal Orialde.

Además de las instalaciones, fantásticas y muy limpias, destacaría el ambiente casero del hostal y la bonita decoración. Además, sus dueños, una pareja encantadora, compartieron conmigo su cena una noche que se me hizo muy tarde para cenar fuera. Me acogieron como una hija y me hicieron sentir como en casa.