Cabañas del Athuel" es un grupo de confortables cabañas, situadas en Ostende, en la cercanía de sus amplias y serenas playas con acceso a un excelente parador ;"Barlovento".Su ubicación es privilegiada dado que permite un acceso directo a Cariló, Valeria del Mar y Pinamar. Se hallan en medio de un ambiente natural que destaca por su tranquilidad. Rodeadas de espacios verdes, que nos hacen sentir un aire diferente con la intimidad de estar en casa. Atendidas por sus dueños, y pensadas en especial para disfrutar de un descanso confortable, en un ambiente específicamente diseñado para relajarse. Cuenta con grandes parques verdes individuales y con jacuzzi al aire libre, con agua climatizada, para uso exclusivo de los moradores de cada unidad. El quincho y la parrilla es un espacio para pasar gratos momentos en familia, de manera íntima, durante el día o en las estrelladas noches. El servicio de mucama incluye la limpieza de la vajilla, para que las vacaciones sean un momento de real descanso. Deseamos que te olvides de todo y vengas a disfrutar.Aquí te estaremos esperando para atenderte de manera personalizada.Tan solo resta que te decidas...

Este es mi lugar en el mundo.Lo soñamos con mi familia y con gran esfuerzo lo construimos. Cada año al iniciarse la temporada con inmensa alegría esperamos el arribo de los turistas.Muchas caras se repiten, porque vuelven a elegirnos, otras nuevas se acercan. Buscamos que su estadía sea lo más confortable posible, les recomendamos restaurantes, casas de comida, lugares para aprovisionarse de mercadería,los mejores paradores y esparcimientos. A mi en particular me encanta el baile, especialmente el tango y disfruto en las noches de Cariló junto a mi esposa de fabulosas milongas perdidas en el bosque. El de la foto, es nuestro hijo, ama el mar y da clases de Surf. Ya nos conocen un poco más.Estamos aquí, alojados junto a ustedes, esperándolos...

Desde sus inicios, Ostende es una villa marítima muy familiar, muy tranquila con mucho para ofrecer durante las horas de sol. Balnearios muy bien acondicionados con prestaciones excelentes, con una franja de arena espaciosa para tomar sol, bañarse en el mar y realizar actividades de recreación playera. Por las tardes, su centro comercial atrapa y tiene todo lo necesario para una estadía bien abastecida. También para despuntar el vicio de un trago refrescante en una de sus coquetas confiterías. El aire libre llama a los deportes de todo tipo. Caminatas por zonas arboladas mientras se disfruta de su perfume y su sombra, cabalgatas, salidas en cuatriciclo y de pesca en todas sus formas, inclusive desde la costa. Quienes desean hacer ejercicio en las vacaciones pueden concurrir a gimnasios, canchas de golf o de tenis. El viejo Hotel Ostende forma parte del patrimonio histórico del lugar. Ya cumplió cien años y sus habitaciones y salones elegantes cobijaron viajeros famosos. El establecimiento sigue vigente, ha ganado en estilo y se ha adecuado a las más modernas tecnologías hoteleras. A su vez, La Elenita es una pequeña casa de veraneo sobre la playa utilizada por las familias