El Caserío de Maura forma parte del grupo Atlantic Blue Ocean, especializado en la gestión de alojamientos turísticos con encanto en Gran Canaria. Contamos con un equipo experimentado y apasionado por la hospitalidad, comprometido con ofrecer un servicio cercano, atento y personalizado. Gestionamos diferentes tipos de propiedades, desde villas rurales en entornos naturales hasta complejos turísticos en zonas costeras, cuidando siempre cada detalle para garantizar la máxima comodidad y una estancia inolvidable. Nuestra filosofía se basa en ofrecer experiencias auténticas, donde el huésped pueda desconectar, descansar y disfrutar del verdadero espíritu de las Islas Canarias. El Caserío de Maura representa ese equilibrio perfecto entre tradición, confort y naturaleza.

Nuestro alojamiento combina el encanto tradicional canario con el confort moderno. Situado en un entorno natural privilegiado, ofrece tranquilidad, privacidad y un ambiente acogedor que invita al descanso. Cada apartamento ha sido cuidadosamente decorado, manteniendo un estilo rústico y elegante, con materiales naturales y detalles únicos. Los huéspedes valoran especialmente la limpieza, la comodidad de las camas y las impresionantes vistas al paisaje canario. Entre los servicios más apreciados se encuentran la piscina, las zonas ajardinadas, el fácil aparcamiento y la atención personalizada del equipo, siempre dispuesto a ayudar para que la estancia sea inolvidable. Ideal para quienes buscan desconectar, disfrutar del sol y la naturaleza o descubrir el auténtico espíritu de Gran Canaria.

El Caserío de Maura se encuentra en Cercados de Araña, una pequeña y pintoresca aldea en el corazón de las montañas de Gran Canaria, ideal para los amantes de la naturaleza y la tranquilidad. El entorno ofrece espectaculares rutas de senderismo, miradores con vistas panorámicas, bosques de pinos y cielos despejados perfectos para la observación de estrellas. A poca distancia se pueden visitar lugares emblemáticos como Roque Nublo, Presa de Chira o el encantador pueblo de San Bartolomé de Tirajana, con su arquitectura tradicional y gastronomía local. Los visitantes disfrutan especialmente del ambiente rural auténtico, la amabilidad de los vecinos y el aire puro de la montaña. Es un lugar perfecto para desconectar del estrés urbano, conectar con la naturaleza y descubrir el lado más genuino de Gran Canaria.