El mirador de Mogro es el lugar ideal para la desconexión y el disfrute. La combinación de una equipación nueva, con muebles nuevos y a medida; la minuciosidad en la decoración, en la que se combinan colores pastel con variedad de elementos decorativos que dan personalidad al espacio; y los elementos de confort con los que el apartamento cuenta, como camas cómodas, calefacción, sofá amplio y ducha de lluvia, hacen de este alojamiento un lugar diseñado para tener la sensación plena de hogar. Además, las vistas con las que cuenta este apartamento acabarán de encantar a todo aquel que venga. Al norte, con grandes ventanales, la amplia ría de Mogro desde un primer plano hasta tal punto que tienes la sensación de estar sobre ella, con el conocido Parque Natural de las Dunas de Liencres al fondo, y al sur, un jardín con variedad de flores y árboles.

Después de restaurar este espacio con todo mi cariño y cuidado, he podido experimentar qué singular es la sensación de vivir en un lugar así. La conexión con la naturaleza, la playa a escasos 5 minutos andando, la calidez del entorno y la buena comunicación por carretera, entre otras cosas, han hecho que tenga la necesidad de que no sólo sea yo el que pueda disfrutar de este apartamento. Me apasiona la idea de que mis huéspedes tengan la oportunidad de conocer un lugar tan bonito, de que disfruten de un apartamento diseñado para el bienestar de uno y se nutran de todo aquello que a mí me deja cada día fascinado.

La zona es tranquila y acogedora. Contamos con la esencia de un pueblo costero, con playa a escasos 5 minutos del apartamento, amplias zonas verdes, paseos bien cuidados, un buen parque para niños a pie de playa e incontables vistas desde diferentes puntos del pueblo. La gente que vive en el pueblo es cercana, respetuosa y dispuesta en todo momento. Además, la urbanización a la que pertenece el apartamento es muy característica. Llena de calles empedradas en diferentes niveles y adosados altos con fachadas blancas y cuidadas, llena de bancos y espacios entrañables. El aparcamiento, exceptuando los meses de julio y agosto, en los que a ciertas horas quizás tengas que alejarte hasta la playa para aparcar (300 metros más), es ideal. Todas las zonas de aparcamiento en el espacio público son gratuitas todo el año y en la urbanización hay una zona habilitada para que los vecinos dejen el coche. Sin embargo, no hay plazas asignadas, por lo que cabe la posibilidad de que estén ocupadas por algún vecino. La comunicación de Mogro es muy buena ya que tendremos Santander, la capital de la provincia, a 15 minutos en coche y Torrelavega, la segunda ciudad más importante, a 10 minutos aproximadamente. Además encontraremos otros puntos de interés como Liencres, a 12 minutos en coche, y Santillana del Mar, a 20 minutos. Mogro cuenta con estación de tren, a 30 minutos del apartamento si vas andando y a 5 en coche y con un centro neurálgico a 1,8 kilómetros del apartamento, con farmacia, supermercados, estanco y bares.