Nosotros somos Secun y Rosa, los dueños del establecimiento cuya gestión llevamos a cabo desde hace diez años; anteriormente lo gestionaron Nico y Raquel, padres de Secun, de manera certera dejando su huella en cada rincón del hostal y aunque nosotros le hemos sometido a una profunda renovación, su espíritu perdura y siguiendo su línea a nosotros lo que mas nos gusta es el trato con los clientes, ayudarles para que tengan una estancia satisfactoria e informarles de cuantas actividades pueden hacer durante su permanencia en el Hostal. Nos gusta recibir sugerencias de clientes y amigos para ir mejorando día a día los servicios que ofrecemos. Hemos dejado una foto en la que aparecemos nosotros dos y en medio una buena amiga, Ana, siempre cargada de buenas e ingeniosas ideas dispuesta a ayudar.

El Hostal El Resbalón siempre ha tenido un toque familiar que hace que nuestros clientes se sientan como en casa. El entorno natural salpicado con joyas de la arquitectura románica hace de nuestro establecimiento el lugar ideal para pasar unos días inolvidables. Os dejamos fotografías en la página web que muestran lo que os acabamos de contar. Podéis ver los paisajes de montañas y bosques cuya belleza resalta en cualquier época del año y que invita a realizar excursiones de distinta dificultad visitando tanto un roble milenario como los lagos del Curavacas, pasando por la Tejeda de Tosande o el nacimiento del río Pisuerga. Es de obligado cumplimiento visitar la comarca de La Pernía en plena montaña Palentina, con sus pueblos pintorescos casi despoblados y donde destaca la presencia de la iglesia de San Salvador de Cantamuda del mas puro estilo románico. Siguiendo con el románico, cabe destacar la visita a San Andrés de Arroyo, al pórtico de la iglesia de Moarves de Ojeda o al Monasterio de Santa María la Real. Si nos alejamos unos kilómetros mas podremos disfrutar de la Villa Romana de la Olmeda y de la Colegiata de Frómista, sin olvidarnos que estamos en Cervera de Pisuerga.

El Resbalón se encuentra al lado del Ayuntamiento y, por tanto muy céntrico. Al ser Cervera de Pisuerga un pueblo pequeño no se puede decir que esté dividido en barrios, sino que tomamos Cervera como un todo, y así encontramos cerca de nuestro hostal sitios de ocio tales como restaurantes, bares o discotecas; en verano son especialmente agradables las terrazas que instalan en la plaza. Es digno de destacar en el pueblo un eremitorio rupestre, la iglesia de Santa María del Castillo o el paseo entre robles a orillas del Pisuerga. Son impresionantes las vistas al pantano de Ruesga desde el Parador o al pantano de Requejada desde el alto de las Matas. La gastronomía de la zona es sencilla pero de gran calidad, combinan la carne de Cervera con denominación de origen con el uso de las setas, que abundan en la zona tanto en variedad como en calidad, de hecho se puede disfrutar de jornadas micológicas, así como destacan también los guisos de caza y la deliciosa preparación de las truchas o de los cangrejos del Pisuerga.