“Le Perroquet qui Bulle” es una joven aventura nacida del deseo de ofrecerle un paréntesis de ensueño, dulzura y descubrimiento. Ya rica en historias que contar, busca tejer vínculos sutiles entre pasado y presente para hacerle viajar… en todos los sentidos. Nos importa hacer las cosas con sensibilidad: dar un soplo de juventud sin traicionar nunca el alma de lo antiguo. Preservar el espíritu del lugar, sus valores y su carácter, aportando al mismo tiempo el confort esencial de nuestra época. Estas edificaciones llenas de memoria se convierten así en refugios elegantes e inspiradores, donde se saborea el encanto del paso del tiempo… y el arte de vivir actual. A través de ellas, le invitamos a explorar toda la historia de nuestra ciudad, sus viñedos y su patrimonio —con sentido, con corazón y siempre con poesía.

Bienvenidos a “Le Perroquet qui Bulle”, en el corazón de Reims, donde el encanto, la elegancia y la serenidad se unen para ofrecer una estancia extraordinaria. Frente a los jardines verdes de las Hautes Promenades, en un edificio antiguo cuidadosamente renovado, este apartamento es un verdadero nido suspendido sobre la ciudad. Detrás de los grandes ventanales, la silueta majestuosa de la Porte de Mars —testigo del Imperio romano— vela silenciosamente por su estancia. En el interior, cada detalle refleja una atención delicada: muebles de familia, objetos antiguos, materiales nobles y guiños a la estética refinada de Marella Agnelli. Aquí, la elegancia italiana se encuentra con el confort moderno. El salón luminoso, la cocina totalmente equipada, el aire acondicionado, el baño privado y los servicios conectados (Wi‑Fi, TV de pantalla plana) han sido pensados para ofrecer una experiencia suave y de alta gama. Un lugar donde la rutina desaparece poco a poco, dejando espacio al placer de vivir al ritmo de la ciudad, dentro de una burbuja de tranquilidad.

Idealmente situado entre el centro, los espacios verdes y el mercado cubierto de Boulingrin, “Le Perroquet qui Bulle” le invita a descubrir la esencia misma de Reims. A pie, en tranvía (a solo 200 m), en autobús (parada justo enfrente del edificio) o en tren desde la estación Reims‑Centre (a 400 m), todo está al alcance de forma rápida y sencilla. En un corto radio, encontrará muchos tesoros: A 100 m: la Porte de Mars, majestuoso vestigio romano que marca la entrada al casco histórico. A 150 m: el barrio de Boulingrin con sus pabellones Art Déco y su mercado de productos locales y artesanales. A 500 m: la plaza Drouet‑d’Erlon con restaurantes, cines, terrazas animadas y fuentes iluminadas. A 900 m: la catedral de Notre‑Dame, joya gótica Patrimonio Mundial de la UNESCO, accesible en 10 min andando. En verano, su espectáculo de luz y sonido es imperdible, como el de la basílica de Saint‑Remi. Frente al apartamento, los Hautes Promenades acogen eventos durante todo el año: mercado navideño, festivales, conciertos al aire libre… Para los amantes de la cultura, la Ópera de Reims propone una programación clásica y contemporánea, mientras que Reims Arena acoge conciertos, espectáculos y artistas reconocidos. Entre patrimonio, vida de barrio y movilidad, nuestra ubicación es el punto de partida ideal para descubrir Reims en todas sus dimensiones: históricas, culturales y humanas.