La Casa Sabbenerica está ubicada en el corazón de Palermo, a 10 minutos de la estación central y a 5 minutos del metro. El apartamento puede alojar cómodamente hasta 5 personas y también está equipado con lo necesario para un bebé: cuna, trona, vajilla de silicona y una puerta de seguridad. La Casa Sabbenerica se divide en zona de día y zona de noche. En la zona de día encontrarás un pequeño comedor con cocina, un sofá cama individual y medio, un baño con bañera y un balcón. En la planta baja, en la zona de noche, encontrarás un amplio dormitorio, una bonita habitación con literas y un baño con ducha. Cada espacio está equipado y amueblado para satisfacer todas las necesidades de mis huéspedes.

¡Soy Elisabetta y les doy la bienvenida a casa Sabbenerica! Sabbenerica es un término antiguo, utilizado por la gente de antaño que, al encontrarse en los callejones de Palermo, se saludaban así: "Sabbenerica". Es decir, que seas bendecido, que seas bienvenido. Por eso quise llamar así a mi casa para ustedes. Cada vacación es una conquista. Se dedica tiempo a uno mismo, a la familia, a los amigos. Una vacación es el resultado de un año de trabajo y sacrificios. He ideado casa Sabbenerica para hacer que su vacación sea confortable, acogedora, agradable y relajante. En un lugar maravilloso, solo tendrán que salir de casa y de inmediato vivirán la historia de Palermo, y en casa, no les faltará absolutamente nada. Así que... me gustaría que la vacación en Palermo y en Sabbenerica siempre sea recordada con una sonrisa. ¡Les espero para darles la bienvenida: sabbenerica!

Casa Sabbenerica, justo en frente de la Catedral, en el Corso Vittorio Emanuele, donde el arte y la cocina se encuentran en las calles de un histórico Palermo. Encuentras de todo, iglesias, tiendas para ir de compras, teatro de marionetas, bares, trattorias, restaurantes. Un paseo por el Corso Vittorio Emanuele desde la Catedral te lleva al corazón de Palermo. En pleno centro, y en total seguridad, farmacias, hospitales, comisaría... todo está allí alrededor. Pero también supermercados, panaderías, y... la comida callejera palermitana está al alcance de la mano.