Hoteles Ibis en Ámsterdam

Ubicación inmejorable, cerca de todos los transportes y accesible a pie a la mayoría de atracciones turísticas del centro. Elegí una habitación pequeña y al llegar me sorprendió que el tamaño era bastante “normal” para como son los Ibis. El baño en cambio sí que me pareció estrecho. La cama era muy cómoda, y ponían toalla de manos y de ducha. Junto a la recepción hay un bar, y si lo encuentras cerrado hay una nevera y estante con snaks, bebida y algo para picar, es de autoservicio muy cómodo.

Típico Ibis. Buen desayuno Recepción muy buena Bar bueno Restaurante flojo

El bar del hotel, La libertad que tienes para moverte. La habitación excelente. Me dieron una más grande que la contratada. Con IBIS nunca te vas a sorprender. Siempre tiene el nivel que dice tener.

Está en una muy buena ubicación, es un clásico Ibis, es decir funcional pero no elegante, si funcional. Muy cerca de la Estación central y actividades como botes por los canales y subida y bajada de buses. Cerca del barrio rojo también. Lo único que diría muy caro 300 E por 1 noche 1 persona me parece caro. En todo caso todo Amsterdam es caro.

Cuando viajamos nos gusta mucho ir a hoteles Ibis por su relación precio calidad. En este caso, al no conocer Ámsterdam y al ver tanta oferta de alojamiento elegimos sin dudar este hotel ya que sabíamos cómo sería. Por otro lado como viajamos por tren está al lado de la estación (que está cerca del centro histórico) cosa que nos resultó muy práctica. Nos fuimos en avión, para ello también usamos el tren. Al tomar la habitación nos decía que era pequeña. Nos resultó de excelente tamaño, conociendo los Ibis