Ryokans en Koshinetsu

Ubicación con excelentes vistas al lago y monte Fuji. Personal amabilísimo y trato familiar. La experiencia de dormir con futón en tatami, disfrutar del onsen tradicional y probar auténtica comida japonesa. Servicio de transfer desde la estación. Tienen muchos detalles para agradar al huésped

Es increïble! Nos ha encantado. Las personas que llevan el hotel son encantadoras, la habitación es japonesa tradicional y te explican como hacer todo. Te dejan probar kimonos, te dan un desayuno sencillo todas las mañanas. Està super bien ubicado. Sin duda volveria a quedarme ahí. ¡No queriamos irnos!

Nos encantó el Hotel. Es una excelente muestra de hospitalidad. Las habitaciones japonesas y el servicio te hacen sentir confortablemente agradable. Te facilitan tu estancia, el onsen es excelente.y te ayudan con tus traslados e información local. Seguramente VOLVERÉ!!! Se los recomiendo

Alojamiento estilo japonés. Baño termal en la segunda planta. Amabilidad y limpieza

Realmente el Ryokan es increíble. Es acogedor y al mismo tiempo moderno sin perder parte de la tradición japonesa. El staff es súper amable, el hotel estaba impecable y el desayuno preparado con amor. Ubicado a pasos del templo en una zona súper viva durante el día. Pasamos una sola noche y fue memorable.

Un ryokan increíble, sientes que vives el Japón más auténtico. El anfitrión es muy amable, nos recibió con un té verde riquísimo y unas chuches japonesas. Los futones son muy cómodos y calentitos. La habitación que nos tocó tenía vistas al monte Fuji (pero como hacía mal tiempo no lo pudimos ver, una lástima!) Muy recomendada experiencia :)

Todo el Ryokan impresionante, que bien lo conservan, sólo estuve una noche pero me sentí com un autético japonés!

Es una típica casa japonesa, con todas las acomodaciones que se pueden tener. pudimos lavar ropa sin problema, cosa que agradecemos. los propietarios se portaron muy bien y nos ayudaron mucho.

Es un ryokan típico japonés encantador, en un entorno mágico, a pocos metros del templo Zenko-ji. Hospedarse aquí es una maravillosa experiencia, imprescindible para sumergirte en las costumbres tradicionales del país. Los propietarios rebosan hospitalidad y se defienden en inglés. El desayuno, riquísimo. ¡Súper recomendable!