Hoteles spa en Pirineos

el tratamiento del spa fue fantástico

Volveremos. Un hotel spa que está muy bien situado. Se puede aparcar fácilmente. La habitación amplia. Muy bonita. Se agradece el té caliente después de la nieve. Tambien la zona de spa. Piscina con agua templada, el jacuzzi caliente. Super. El desayuno muy variable, y muy rico. Mi respeto al personal de limpieza de habitaciones. Nos solucionó el problema al instante. Y super amables. Siempre he pensado que con amabilidad y una sonrisa se soluciona cualquier problema.

El desayuno está genial, el comedor es muy agradable. El apartamento está muy bien equipado y es cómodo. Lo mejor del spa fueron las chicas que nos atendieron y los tratamientos que hacen. Muy contentos con nuestra estancia.

El desayuno es muy completo, tipo buffet, abundante y muy rico todo. Tienen unos zumos detox fantásticos y uno yogures caseros maravillosos. El spa aunque ya no es de acceso libre, son 2 euros por persona una hora, lo cual es barato. Hay que reservar hora. Tiene sauna seca y húmeda, zona de relax, jacuzzi, y un pequeño gimnasio. Esta vez no probé ningún tratamiento o masaje, pero sí en otras ocasiones y sus profesionales lo son, son fantásticos. El Carlemany es mi hotel cuando voy a Andorra.

El Spa excelente, la Judith y la Bárbara consigueron que ya el primer día nada más llegar nos sintiéramos desestresados... Un trato especracular!!! Un masaje y un tratamiento facial que contratamos con ellas nos hizo liberarnos de las tensiones acumuladas e iniciar las vacaciones ya con otra mirada. Por otro lado, el hotel está a pie de naturaleza. Un privilegio!! Solo gracias!

Bellísimo y tranquilo lugar. Muchas rutas y espacios maravillosos, llenos de calma, paz, bienestar … Ben y Corina entrañables anfitriones. Hacen de la estancia, momentos maravillosos. Súper amables. Queriendo que me sintiera bien. Se levantaron Antea de lo habitual a prepararme el desayuno porque me iba a un largo viaje. Los productos home made. Tienen huerto, gallinas. Calidad a la hora del desayuno y cena. La restauración de la casa es impecable con gusto y delicadeza. La Volveré a ir. Valió totalmente todo.

Las habitaciones son correctas, con amplia ducha, en lugar de bañera y el w.c. aislado. El telefono de la ducha mejorable. El espacio de aguas, Termas de Tiberio, aceptable y amplio, con una piscina exterior de agua caliente donde puedes disfrutar del tratamiento de aguas, con lluvia o nevando. La ocupacion del espacio un poco excesiva, todo y que se ha de reservar turno con antelacion.

Desayuno muy completo,decoración moderna,spa y tratamientos genial,personal muy atento y agradable.

Las vistas al estanque son simplemente espectaculares. Todas las instalaciones y partes del hotel están cuidadas al detalle. Nos gustó mucho el jardín, y en el que hay varias mesas y sillas para poder disfrutar del mismo y las vistas del restaurante, desse el que parece que estés encima del estanque. La ubicación también es muy buena, estando situado a 5 minutos del centro de Puigcerdà. El personal muy amable y atento y los tratamientos del spa increíbles. Volveremos seguro!